UNA ESTATUA VIVIENTE
Por: Ruben Rios ” MR PACHANGA
Hay artistas que son geniales, pero nacen sin Angel.
Hay otros artistas, que también lo son, pero a diferencia de esos primeros, desde que reciben el primer sorbo de oxigeno, y lanzan el primer suspiro, se hacen notar. Esos vienen acompañados de uno o más ángeles, que se encargan de entregárnoslo al mundo en que habitamos. Y ese es el caso de la rutilante Vedette, “July del Rio”.
Tuve el placer de conocerla por primera vez, una tarde de verano, en el edificio donde se encontraba ubicada La Sociedad de Artistas Cubanos.
Veraniega pero sencilla y elegantemente vestida, se hacía acompañar por Pacheco, un caballero que era muy conocido entre nosotros los artistas, muy buen cantante que recientemente se había retirado de la actuación, dedicándose a representar artistas que después convertía en estrellas.
Esa tarde en que por primera vez la vi, July no pasó desapercibida. Estaba parada afuera en la acera con Pacheco, y otro caballero más.
Dentro del salón principal, donde nos reuníamos todos los artistas, sentados como si fuera en un baile donde se celebraba un cumpleaños, los murmullos se agigantaban, y la pregunta oficial era: Quien es ella ? En ese salón había sillas, sillones, mesas donde algunos jugábamos Dominó, otros miraban la Televisión, y la mayoría chismeábamos.
Parecía la sala grande de una casa de familia, pues así nos considerábamos muchos de nosotros…”Una Familia”. Aunque claro, también había algunos que no podían ver a otros ni en pintura, por lo que a veces se convertía esa sala familiar, en un verdadero “Solar Cubano”.
Pero esa tarde, todas las miradas y el cuchicheo, estaban centrados en la muchacha con rostro angelical, y cuerpo de estrella. Sabíamos que Pacheco era conocido por representar a mujeronas esculturales, pero como dijo Juanita Alburquerque esa tarde…..Ñoooo, que cuerpazo tiene esa muchachita….Dirigiéndose a varias bailarinas que habían ido a ensayar con Joseito el coreógrafo. (Juanita era muy folklórica y ella y Nancy Alvarez la cantante de Montmatre, hacían un dúo de chisme y folklorismo: ESPECTACULAR)
Así comenzó la presencia de July del Rio en mi vida. No sé si ya había comenzado a modelar en Tropicana, o si estaba por comenzar. Pero ya se le veía, sin decir una sola palabra, como derramaba: Su Polvo de Estrella.
Después coincidía con ella, en muchos centros nocturnos, también en la Asociación de Artistas, pero para entonces, no éramos amigos. Solo colegas que nos saludábamos cordialmente cuando se presentaba la ocasión.
Mas cuando yo llegue a México en 1960, ya si la Farándula Mexicana había notado la presencia de July del Rio. Ya se hablaba de ella con un respeto profesional impresionante. Se le incluía en proyectos y se apreciaba su labor artística. Ya desde entonces nos fuimos acercando mutuamente.
Como siempre he dicho, aparte de apreciarla como cuerpo y artista, fui descubriendo su valor humano, y que no había llegado a este planeta, para ser solo una muñequita muy hermosa, que exhibiera sus encantos para deleitar a un público con su arte.
Ya desde México, me fui dando cuenta que detrás de su figura, su personalidad, y su exquisito arte, existía un alma, un corazón y un cerebro.
Dios me ha premiado, que aunque no hemos coincidido mucho, debido a sus compromisos y los míos, pues siempre estuvimos actuando la mayor parte del tiempo, en ciudades diferentes, siempre hemos mantenido el mismo afecto intacto.
Hablar de July del Rio, es hablar de una Estatua Viviente Sagrada con mucha sensibilidad.
En hora buena July. Me honro con ser tu amigo.
Ruben Rios Mr. Pachanga